Optimista. Creo en la capacidad que tenemos de crear cosas fantásticas, de ampliar el bienestar, de mejorar el medio ambiente… Racional. Hay datos y hechos que ponen de manifiesto el gran avance y mejora que ha experimentado la humanidad. Pro-tecnología. La tecnología ha sido y es un potente acelerador de toda esta mejora. Realista. No lo estamos haciendo bien.
He escuchado a Antón Costa varias veces… y tengo que reconocer que me ha removido todas ellas. Su técnica económica me ilustra y su experiencia práctica se nota en la calidad de sus preguntas y sus reflexivas respuestas. Esta semana, en el evento de APD en Santiago de Compostela y después de que grandes profesionales del mundo de la innovación nos resumieran las bondades que viviremos los próximos años… Antón Costa me/nos vuelve a remover con una simple pregunta:
«Si todo lo que tenemos frente a nosotros son enormes oportunidades, ¿por qué la sociedad está tan malhumorada, por qué hay tantos conflictos de enorme dureza en Asia, en Europa, en Latinoamérica… por qué la sociedad hoy es tan desconfiada… a qué tiene miedo?»
Vivimos en una profunda transformación digital donde la tecnología no es lo más importante. Vivimos en un sistema económico que ha creado durante los últimos 50 años una clase media que hoy el propio sistema está empobreciendo y debilitando. Cuesta encontrar claridad, socialmente cuesta no entrar en contradicciones sobre hacia donde nos dirigimos.
Aquí mi recopilación de frases y videos del profesor Antón Costa. Aportan claridad e invitan a trabajar en esa otra revolución no digital que toca: la ética económica, el propósito de las empresas, los valores, la responsabilidad social…
- La rabia social tiene 2 grandes orígenes: la desigualdad y el miedo a perder el bienestar alcanzado.
- Las clases medias se sienten amenazadas, tienen miedo. En gran parte de Europa, esa clase trabajadora descontenta está votando a la extrema derecha.
- Generación frustrada. Nuestros padres son hijos de un sistema capitalista que les dio oportunidades, y de esas oportunidades nació la clase media global y la democracia. Las nuevas generaciones no le tienen cariño al sistema… se han formado como nunca para ganar 1.000€ que no dan para un alquiler y formar una familia.
- Responsabilidad de la tecnología. La sociedad nos está escuchando decir que la automatización crece día a día a pasos agigantados. Y eso provoca miedo a perder el empleo, miedo al cambio… El sector tecnológico tiene que ser más consciente del mensaje que está haciendo llegar a la sociedad. Las promesas de nuevas formas de trabajar no mitigan el miedo y la preocupación social. El uso de la tecnología para mejorar la empleabilidad de los trabajadores es una dimensión esencial de esa nueva conciencia empresarial. Se trata de pasar de la responsabilidad social de la empresa (RSE) a la responsabilidad tecnológica (RTC).
- El propósito de la empresa. ¿Tiene algo que ver la empresa en todo esto? claramente sí… recordemos el mantra de maximizar el beneficio para el accionista a cualquier precio. Solución: la empresa debe contribuir al cambio… el propósito de la empresa debe ser más amplio. Interesantes iniciativas ya en marcha como la Business Roundtable y la Bcorp, ODS, el accionista leal, la rentabilidad con propósito… señalan el camino a seguir.
- Formación y culturización. Si las nuevas tecnologías no vienen acompañadas de una formación inclusiva, podemos encontrarnos con paradojas como la de las infraestructuras digitales en España. Somos el país europeo con la mayor red digital de Europa y el quinto del mundo. Pero a la vez estamos en el puesto 24º entre los 28 países europeos en utilización de esa tecnología. No es un problema de acceso, es un problema de formación.